Por: Alfonso ochoa, Lunes, 11 de Agosto de 2008
El inmueble ubicado en la comunidad Sangre de Cristo sería un detonante para el ecoturismo: Dolores Álvarez
La regidora Dolores Álvarez Gasca señaló que es urgente que se continúe con la restauración del Convento de San Ignacio, antiguo edificio localizado en la comunidad de Sangre de Cristo, camino a Cristo Rey, ya que este lugar podría servir como atracción para el ecoturismo.
La funcionaria, especialista en arte religioso, dijo que al parecer el convento fue construido a inicios del siglo XIX, y que supuestamente fue habitado por frailes franciscanos.
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href="http://ads.us.e-planning.net/ei/3/2499/ff6298815caa3429?it=i&rnd=$RANDOM" target="_blank">Álvarez Gasca comentó que supo de una tesis de una arquitecta que propone rescatar el lugar para promover el ecoturismo, idea que le parece una excelente inversión.
La gente de la zona donde se ubica el convento y la iglesia, que ahora está en ruinas, no sabe cuándo se edificaron, aunque afirman que en ella vivieron frailes franciscanos, y que el lugar quedó abandonado después de la guerra cristera.
Blasa Figueroa Arredondo, habitante del lugar y encargada de cuidar la iglesia cuenta que hace poco se comenzaron a hacer trabajos de restauración en el techo de la iglesia, pero que falta mucho trabajo para que quede bien y no se siga destruyendo.
La iglesia se llama de San Ignacio por la mina que está al lado, pero en ella se venera a la Purísima Concepción, explicó.
La entrevistada dice que según las leyendas que ha escuchado, cuando fue la guerra cristera el templo y el convento quedaron arruinados y los frailes fueron asesinados.
"Yo sólo cuido el lugar, sé que nada es mío, lo que más me gustaría es que la iglesia volviera a tener vida, que hubiera casamientos, bautismos, misa, rosario, eso es lo que me gustaría" concluyó Blasa Figueroa.
grave deterioro
Según fotografías tomadas en 1971 por el historiador José Luis Lara, en la parte de la iglesia había algunos murales, que ahora están tan dañados que ya casi no pueden distinguirse.
La iglesia de cantera rosa y estilo neoclásico, luce muy deteriorada, el patio central sin techos, por lo que queda de las ruinas se puede suponer que el convento tuvo una planta baja, en donde ahora los lugareños, la usan como corrales, para chivas, burros y gallinas.
El inmueble ubicado en la comunidad Sangre de Cristo sería un detonante para el ecoturismo: Dolores Álvarez
La regidora Dolores Álvarez Gasca señaló que es urgente que se continúe con la restauración del Convento de San Ignacio, antiguo edificio localizado en la comunidad de Sangre de Cristo, camino a Cristo Rey, ya que este lugar podría servir como atracción para el ecoturismo.
La funcionaria, especialista en arte religioso, dijo que al parecer el convento fue construido a inicios del siglo XIX, y que supuestamente fue habitado por frailes franciscanos.
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La gente de la zona donde se ubica el convento y la iglesia, que ahora está en ruinas, no sabe cuándo se edificaron, aunque afirman que en ella vivieron frailes franciscanos, y que el lugar quedó abandonado después de la guerra cristera.
Blasa Figueroa Arredondo, habitante del lugar y encargada de cuidar la iglesia cuenta que hace poco se comenzaron a hacer trabajos de restauración en el techo de la iglesia, pero que falta mucho trabajo para que quede bien y no se siga destruyendo.
La iglesia se llama de San Ignacio por la mina que está al lado, pero en ella se venera a la Purísima Concepción, explicó.
La entrevistada dice que según las leyendas que ha escuchado, cuando fue la guerra cristera el templo y el convento quedaron arruinados y los frailes fueron asesinados.
"Yo sólo cuido el lugar, sé que nada es mío, lo que más me gustaría es que la iglesia volviera a tener vida, que hubiera casamientos, bautismos, misa, rosario, eso es lo que me gustaría" concluyó Blasa Figueroa.
grave deterioro
Según fotografías tomadas en 1971 por el historiador José Luis Lara, en la parte de la iglesia había algunos murales, que ahora están tan dañados que ya casi no pueden distinguirse.
La iglesia de cantera rosa y estilo neoclásico, luce muy deteriorada, el patio central sin techos, por lo que queda de las ruinas se puede suponer que el convento tuvo una planta baja, en donde ahora los lugareños, la usan como corrales, para chivas, burros y gallinas.
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