Por: América Ortiz, Domingo, 18 de Enero de 2009
Pobreza y riqueza se ven las caras en este singular sitio
SAN MIGUEL DE ALLENDE
Una ciudad de contrastes es San Miguel Allende. Dos mundos, como lo definen los nativos de esta ciudad ahora declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad pues, los trabajadores jubilados de Estados Unidos que llegan a esta ciudad han creado una "sociedad" para ellos.
Sitios donde viven en fraccionamientos lujosos con todos los servicios básicos. Otra sociedad es la que les queda a quienes nacieron aquí.
Vivir en el "downtown"
Los comercios del centro están preparados para atender a clientela que no hable español, pues la mayoría tiene a empleados que al menos pueden ofrecer los productos en inglés, e incluso los precios están marcados en ambos valores, mientras tanto en la periferia todo se vive como en cualquier parte del país.
Los mexicanos que han radicado toda su vida aquí consideran que San Miguel está dividido en dos "mundos": en el que viven ellos, donde se enfrentan todos los problemas de una sociedad "común y corriente" y los sitios donde viven los extranjeros, que son los fraccionamientos más lujosos y con todos los servicios.
El gerente general del Consejo Turístico de San Miguel de Allende, Guillermo González, aseguró que el 82.51% de los turistas que llegan a San Miguel de Allende son nacionales, mientras que el 17.49% son extranjeros. Entre residentes y turistas extranjeros, es San Miguel el único municipio del estado considerado como cosmopolita en Guanajuato, y donde se puede confirmar que los migrantes no son sólo aquellos mexicanos que van a Estados Unidos a buscar una mejor oportunidad de vida, sino también los estadounidenses que llegan a vivir aquí.
La diferencia podría radicar en que los mexicanos que van a Estados Unidos lo hacen en busca de dinero, mientras que los norteamericanos viene a gastar sus recursos económicos, pero esta regla se rompe cuando los extranjeros comienzan a abrir negocios diversos en este municipio, lo cual es recurrente en bares y restaurantes y otras empresas.
Finalmente, el municipio está acostumbrado a la presencia de extranjeros, y mejor aun, están agradecidos en varios sectores porque han conformado asociaciones de apoyo social a las familias vulnerables de este municipio y generan fuentes de empleo.En 2007, según declaró entonces Bill Taylor, representante de la comunidad estadunidense en San Miguel Allende, reconoció que más de 12 mil ciudadanos de ese país permanecen en este municipio.
Dijo entonces que unos 200 de sus connacionales vienen año con año al municipio sólo invitados por sus parientes; de ellos unos 80 se quedan a vivir aquí. Taylor tiene más de una década de vivir aquí.
Explicó la población que llega a San Miguel en su mayoría son porque no quieren vivir en las grandes ciudades o llegan para hacer algún negocio. En su caso dijo ser propietario de una ferretería en la que trabajan mexicanos, como en su tierra, sólo que aquí, Bill es el migrante.
Según autoridades municipales, cada año se registra un incremento poblacional del 5%. Pero en su gran mayoría son ciudadanos estadunidenses que llegan a esta ciudad con la intención de vivir de manera indefinida.
Lo hacen por el clima, la amabilidad de su gente, y las comodidades que les permite traer sus costumbres en un pequeño pueblo escenario de múltiples películas proyectadas en su país.
El gobierno municipal, proyectaba que en un lapso de 5 años comenzaría a llegar mayor porcentaje de estadounidenses a radicar en San Miguel de Allende, pero a raíz de la crisis económica que enfrente el país del norte, los migrantes a México podrían no venir hasta que "las aguas" se hayan calmado.
Lo anterior fue confirmado por Francisco Peyret, director de Fomento Económico y Relaciones Internacionales del gobierno municipal.
Una ciudad para vivir
Según la revista Conde Nast Traveler, una de las más prestigiosas en el segmento de turismo, en su edición de noviembre, San Miguel Allende está entre los puntos de destino turístico más atractivos para los ciudadanos estadounidenses.
La misma revista encuestó a varios empleados de aquella nación sobre dónde les gustaría vivir en sus años de retiro de la vida productiva y una de las respuestas mas recurrentes fue San Miguel Allende.
Actualmente por las calles de San Miguel de Allende se nota en todo momento la presencia de estadounidenses, pero según información de la Dirección de Fomento Económico y Relaciones Internacionales, en San Miguel de Allende existen cerca de 8 mil, en su mayoría procedentes de Estados Unidos, pero también los hay de otras partes del mundo, como Canadá, España y hasta de Asia.
En San Miguel de Allende existen en total 134 mil 880 habitantes, de los 59 mil 691 están asentados en la cabecera municipal.
Francisco Peyret, mencionó que en promedio llegaban a radicar a la ciudad de San Miguel de Allende un cinco por ciento más cada año, pero a raíz de la crisis económica que actualmente experimenta ese país, así como el mundo entero, pronostican que dejarán de hacer hasta volver a tener seguridad en su nación de origen.
"Creemos que esperarán a que su situación se acomode, tomen confianza a su país y después de ello, busquen casa en San Miguel de Allende", expresó Peyret.
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