Por: Beatriz Ramos, Viernes, 03 de Abril de 2009
Desde hace 54 años, Carlos Oliva y su familia emplean sus manos para mantener vivas las tradiciones de los guanajuatenses
ÉNFASIS
Tradición, con sus manos, Carlos Oliva y sus hijos: Juan Antonio, Elia Rosa, Juan Carlos, Martha Elena, Viridiana y Juan Sebastián, ayudan, desde hace 54 años a mantener vivas las tradiciones de la Semana Santa al elaborar "silicios" y sogas, accesorios utilizados por "los cargadores de Nuestro Padre Jesús" en los templos de la Compañía, Cata, San Roque, Mineral de Santa Ana, Santa Rosa de Lima, Marfil y San Sebastián. Mediante diversas técnicas, se dedican a la cartonería en forma de abejorros, elefantes, caballos, conejos, patos y hasta personajes como Pinocho.GUANAJUATO
El ingenio creativo de Carlos Oliva Mares, uno de los integrantes de esta reconocida familia artesanal netamente guanajuatense, no se ha amilanado ni siquiera por la crisis económica, menos por la industria que paulatinamente y desde hace muchos años, fue supliendo su tarea artesanal como hacedores y creadores de la cartonería, del papel picado, el alfeñique y de las piñatas.
En cambio siguiendo con su vocación de artesanos, el Viernes de Dolores, día en que los guanajuatenses viven una de sus más antiguas tradiciones, éstos se encontrarán con una novedad, en la que la técnica de la cartonería dará vida a "una gallina con sus huevos de oro", atractivo muy ad-hoc a esta celebración que aunque no hace muchos años que surgió se ha ido arraigando, sobre todo entre los niños y niñas que esperan como obsequio de esa celebración huevos con confeti en una canasta de colores.
Elia Rosa Oliva Palma, hija de don Carlos Oliva Mares, comenta sobre esta novedad del Viernes de Dolores, que surge como una nueva opción de su vocación artesanal, ya que el papel picado que no hace muchos años era apreciado no sólo por los guanajuatenses sino por muchos puntos del país por su singular manera de ser trabajado por la familia Oliva Mares, y que definitivamente fue desplazado, por lo que se optó por trabajar mejorando la técnica, el cascarón de huevo que desde hace años sale al mercado en forma de abejorros, elefantes, caballos, conejos, patos y hasta personajes como pinocho; resultando ser un atractivo muy apreciado también.
Redoblan actividades
Con motivo de las festividades del Día de las Flores y del Viernes de Dolores, la Dirección de Fiscalización otorgó 400 permisos para la instalación de puestos de ventas de flores en el Jardín de la Unión, Mercado de Gavira, Plaza del Músico, Plaza de la Paz y en el exterior del Mercado Hidalgo.
También se permitió la colocación de un área de comida.
En tanto, la Dirección de Seguridad Ciudadana implementará un operativo especial de vigilancia a fin de mantener el orden durante la Semana Santa en la capital, principalmente para el jueves y viernes santos.
Con lo anterior, el personal de las direcciones de Seguridad Ciudadana, Servicios Públicos Municipales y Fiscalización no tendrá vacaciones durante la Semana Santa ni la de Pascua, lo anterior con el objeto de mejorar los servicios que ofrecen, informó el secretario de Ayuntamiento, Eduardo López Goerne.
[Alfonso Ochoa]Pero no es sólo esta la actividad que Carlos Oliva ha fomentado entre sus hijos Juan Antonio, Elia Rosa, Juan Carlos, Martha Elena, Ma. Viridiana y Juan Sebastián, sino que siguiendo las enseñanzas del patriarca de la familia el recordado J. Isabel Oliva Sánchez, al iniciar el año, comienza a trabajar en la confección de los "silicios" y las sogas, accesorios que son utilizados por "los cargadores de Nuestro Padre Jesús" durante las celebraciones de la Semana Santa en los Templos de la Compañía, Cata, San Roque, Mineral de Santa Ana, Santa Rosa de Lima, Marfil y San Sebastián.
El señor Oliva recuerda que desde hace 54 años de los 59 de vida que tiene, aprendió el oficio de esta artesanía que se hace con yute, la cual ha fomentado entre sus hijos.
Es así que en la víspera de las Tres Caídas" y de las celebraciones previas a ellas, don Carlos, teje las sogas aplicando las enseñanzas de su señor padre, sin olvidar los tremendos "piquetazos" que se daba con los clavos utilizados para ello.
Mientras que en la confección de los "silicios", aunque prácticamente el diseño simula un costal, cada año hay que hacerle reparaciones a este atuendo, dado que sus dueños, o han engordado o han bajado de peso, por lo que hay que ir adecuando la vestimenta característica de la Semana Santa.
Es así como la familia de don Carlos Oliva Mares, se mantiene activa durante todo el año realizando actividades artesanales propias a las tradiciones y costumbres de la ciudad, ya sea el alfeñique en el mes de noviembre, piñatas en diciembre, huevos de colores, silicios y sogas en la Semana Santa y la confección de vestimentas utilizadas en las danzas prehispánicas de Guanajuato, al ser los integrantes de la familia Mares Oliva, los precursores y herederos de esta tradición, que sus propios integrantes se niegan a dejar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario