La Garrapata, en deterioro

Por: Rosa Balderas/Alfonso Ochoa, Domingo, 06 de Enero de 2008
El recinto que albergó una mina está en el olvido; urge cronista a rescatar obras
GUANAJUATO
Grandes yacimientos de plata
El cronista de la ciudad, Isauro Rionda Arreguín, alertó sobre el descuido de la imagen arquitectónica de Guanajuato, en particular en referencia a una construcción que se levanta a unos metros de las ruinas de la Mina de "La Garrapata", lo cual calificó de muy grave, "una injuria", pues dañará la apreciación de la imagen de la construcción que data de la época Colonial, y lamentó el silencio de las autoridades al respecto.
Aseguró en entrevista para este medio, que el maestro Rionda, que este hecho ya se ha reportado a las autoridades, pero no se ha tomado en cuenta la denuncia, ni muchas otras que ha venido ya realizando.
Recordó que las ruinas de la mina de "la Garrapata", están ubicadas junto a la carretera panorámica, en el tramo entre el Cerro del Cuarto y la Mina de Rayas. Junto a La Garrapata no hay ninguna otra edificación, pero se detectó que alguien está construyendo al otro lado de la carretera, frente a la vieja e impresionante edificación, un cuarto para vivienda o tal vez para algún taller mecánico.
Ese hecho, dijo el cronista de la ciudad, es bastante grave, recordando que Guanajuato está declarado como Patrimonio de la Humanidad no sólo por la ciudad sino por sus minas adyacentes.
"Cómo frente a la mole preciosa que es la mina de La Garrapata se permite que se construya ese piojo enfrente", se preguntó Rionda Arreguín, quien subrayó que el hecho le parece una injuria.
Apuntó el historiador que también ha hecho otras denuncias y nadie atiende los reportes, por ejemplo en el callejón de El Músico, donde "hay un letrerote luminoso, horrible, a pesar de que desde hace 30 años esta prohibido colocar ese tipo de anuncios.
El letrero anuncia a un negocio denominado La Cantera", añadió Rionda Arreguín. Además reportó, el cronista capitalino, la construcción de una casa en el barrio de San Luisito, "una casa horrible que no tiene nada qué ver con el contorno arquitectónico, no se qué ha sucedido con los reportes", agregó quien también afirmó que estaba alarmado por lo que está sucediendo con la imagen colonial de Guanajuato.
"Esta faltando mucho cuidado de la arquitectura típica de la ciudad, por eso si queremos conservar nuestra ciudad necesitamos el apoyo de sus habitantes, de los guanajuatenses, para que denuncien cuando se hacen construcciones que no van con el entorno", apuntó el entrevistado.
Para concluir, opinó Rionda Arreguín que se necesita más acción para proteger a Guanajuato, pues no se puede explicar que las autoridades no actúen con lo que sucede en “La Garrapata", una mina de finales del siglo XVIII o principios del XIX, es una edificación de la colonia.
La ciudad de Guanajuato tuvo su auge precisamente con la explotación de las ricas minas, entre muchas otras, la de La Garrapata, de la que quedan señeras ruinas de que actualmente se pueden apreciar todavía los contrafuertes que detienen las gruesas paredes de piedra. De acuerdo a un texto publicado precisamente por el maestro Isauro Rionda en el año 2003, en el Acta Universitaria, hacia la primera mitad del siglo XVIII, Guanajuato ya era uno más de los productores de plata de la Nueva España, aunque Zacatecas tenía el primer lugar, lo cual se revirtió en la segunda mitad de ese siglo, quedando en primer lugar esta ciudad. La explotación comenzó y se fue arriba con la Mina La Valenciana, pero también había otras muchas más como la de Rayas, Mellado, Guadalupe de Cata, San Lorenzo, Cachona, San Dieguito, la Esperanza, Quebradilla, San Ramón, San Jorge, Santa Anita, San Vicente, la Atalaya, Santísima Trinidad, Promontorio, Cabrera, La Cruz, San Juan, la Aparecida, Lucero, el Sol, Peñafiel, Ponce, San Juan Nepomuceno, La Soledad, Las Ánimas, San Eligio, Serena, Minarica, Calabozo, Señor San José, El Tajo, Camargo, San Bruno y La Garrapata, entre otras muchas más.
De importancia en la nueva españa Todo este conjunto de minas, llevaron a Guanajuato a producir entre la cuarta y quinta parte de toda la plata extraída en la Nueva España y una sexta parte del total producido en toda América. Para lograr lo anterior, refiere el cronista de la ciudad en citado texto, "cada día en Guana- juato se trituraban y molían un poco más de 11 mil quintales de mineral en mil 895 arrastres o molinos movidos por aproximadamente 14 mil mulas, situados en cerca de 80 haciendas grandes de beneficio de patio y un poco más de 200 zangarros o haciendas chicas, de uno o dos molinos".
Un milagro
En un documento de la profesora Patricia campos Rodríguez, del Centro de Investigaciones Humanísticas de la Universidad de Guanajuato sobre ex votos en el templo de la Villaseca relacionado con accidentes de mineros, refiere que aún en 1940 se trabajaba en la zona de La Garrapata: "El día 6 de agosto de 1940 cebio muy grabe el joven Gregorio Copado de tifoidea a consecuencia de una caida que se dio en un poso en la mina de Garrapata y cebio tan grabe que por poco tiempo se moriría y viendo su mamá Prisciliana Hernández tan grabe selo encomendo de todo corazón al Sr de Villaseca que como le mandara su salud le prometia publicar el presente portan grande milagro y recobro su salud en poco tiempo y hoy dan infinitas gracias y cumplen lo prometido a 25 de agosto de 1940 Guanajuato, Gto".
*Correo respetó la ortografía original del ex voto